Adrián Márquez (@triadri82) posee el dorsal 33. Ya acumula tres ediciones de KOA257 y el año pasado debutó en la distancia Ultraman con KOA515.
KOA: ¿Qué es para ti KOA distance?
Adrián: Siempre respondo lo mismo. Para mi KOA es como si fuese parte de mi vida… el día a día de mi vida. Levantarte por la mañana es como decir: vamos a afrontar, vamos a empezar a hacer lo que quiero hacer, vamos a entrenar, vamos a disfrutar, vamos a sufrir, porque evidentemente hay días buenos y días malos. Es eso, un día a día constante. Es lo bonito de KOA (…) Sabes que al final, tienes la recompensa y la recompensa es lo que me da (David, director de la prueba) y me dais desde principio, después de cuatro años estamos siempre en contacto. Al final es la gente que te queda ahí.
KOA: Has participado tres veces en KOA257 y debutaste el año pasado en KOA515, ¿podrías describirnos las sensaciones que has vivido en cada una?
A: Imposible. Describir KOA del paso de 257 al 515… ¡que yo jamás pensé que haría un 515! Todo el mundo, el que hace larga distancia, sabe lo que es el Ultraman. Lo ve para hacerlo algún día, en mi caso era lejano, yo no quería todavía hacerlo, pero hablando con David me lío.
KOA: ¿Qué diferencias viviste entre ambas distancias?
A: La diferencia es muy clara y es el apoyo que te da el equipo. El 257, tu equipo está ahí contigo, te ayuda, pero lo que te ayuda es, a lo mejor, un poco menos de lo que te tienen que ayudar en el 515. En el 515 es total dependencia de tu equipo, no hay lugar para cambiar algo en mitad de la carrera, de: “Pues oye, voy a apretar aquí o voy a hacer esos kilómetros más fuertes a ver qué pasa” (…) En una maratón podemos apretar… en el 515 si aprietas en el 60, aunque te falten 24, no llegas o llegas andando. El equipo ahí te tiene que apoyar. Yo lo tuve muy claro, yo dije: “Si le hago caso en todo al equipo, llego seguro”. Y yo no me salí de las pautas que me marcó el equipo: “Ahora comes, ahora bebes, ahora te paras, ahora te abrigas…” Para mi fue más fácil el 515 que mi primer 257.
KOA: ¿Con qué zona te quedas de los recorridos de KOA?
A: Oronet. Primero porque es como el primer puerto que subes, vas fresquito, vas disfrutándolo, vas viéndolo todo y luego… es el último puerto que subes, prácticamente en el 515, pero por la otra cara. Entonces, sí es verdad que lo vas viendo fresco y disfrutándolo, así como sufriéndolo y a la vez sabiendo que ya estás llegando al final. Ese picor que te entra sabiendo que eso ya está ahí… eso no tiene palabras para decirlo. Sabes que está la meta en el 257 y sabes que te falta nada y menos, para llegar también en el 515.
KOA: ¿Con qué crees que te va a sorprender KOA este año?
A: No tengo idea, pero cualquier cosa que se le ocurra a esta gente… se te queda ya metido. Ya no hace falta casi… te lo digo de verdad, ni que me sorprendan. Con que estén ahí, no solo el día de la prueba, te digo el resto del año, con que estén ahí, ya me vale.